
Las diferentes cepas de vino
Seguro que en múltiples ocasiones habrás escuchado hablar de las cepas de vino. La palabra “cepa” se refiere al tronco de la vid, pero cuando se habla de cepas de vino, generalmente se utiliza para referirse a los diferentes tipos de variedades de uva con las que se hace el vino.
Para saber los tipos de cepa que existen, primero se hace una primera clasificación en cepas tintas y cepas de variedades blancas. También podemos encontrar las cepas de mesa, que son aquellas que se emplean para la uva de consumo como fruta.
Para definir a un tipo de cepa se agrupan las uvas por sus características a nivel morfológico. Aquí se miraría por ejemplo, el tipo de hoja, el color de los frutos, el tamaño de las uvas…
Las llamadas cepas nobles son aquellas que se consideran mejores por su calidad, suelen ser muy resistentes y de fácil adaptación. Las cepas nobles más conocidas son:
- Cepa Tempranillo: es típicamente española y la más utilizada en nuestro país. Es una uva muy resistente. Los vinos de esta cepa no son muy ácidos y suelen ser ligeros pero aromáticos.
- Cepa Syrah: de origen francés, es muy fácil de cultivar y por eso es popular en muchas zonas del mundo. Produce vinos muy sabrosos y con mucho cuerpo.
- Cepa Cabernet sauvignon: es una de las cepas más populares a nivel mundial. También de origen francés, produce tintos con cuerpo y muy intensos.
- Cepa Merlot: muy popular en la zona de Burdeos, produce vinos poco ácidos, frutales en boca y sofisticados.
- Cepa Chardonnay: es la cepa más popular de vinos blancos. Originaria de Borgoña, genera vinos ácidos y secos.
- Cepa Garnacha: también originaria de España, la cepa Garnacha es fácil de cultivar y produce vinos rosados y jóvenes.
- Cepa Riesling: se emplea para elaborar vinos blancos dulces y semisecos. Son vinos afrutados.
- Cepa Sauvignon blanc: otra de las grandes cepas francesas, produce vinos complejos.