
Los vinos secos y sus características
Es normal que cuando comenzamos a aprender sobre el vino, haya conceptos o tipos de vino que aún no conozcamos. El mundo del vino es muy extenso e interesante, pero comprendemos que la terminología quizá sea difícil al comenzar. Por eso hoy te explicamos qué es un vino seco y cómo lo puedes reconocer en base a sus características.
¿Qué es un vino seco?
Técnicamente hablando, se denomina vino seco a aquellos vinos que contienen una concentración de azúcares menor a 12 gramos por litro. Estos azúcares son, por tanto, completamente residuales. Además, son naturales, ya que provienen del azúcar que genera el mosto cuando fermenta en el proceso de elaboración del vino.
Sin embargo, también podemos encontrar en catas de vino y en ciertas ocasiones que alguien denomine a un vino seco refiriéndose a su paso en boca. ¿Por qué ocurre esto?
Es muy común usar el término “vino seco” para hablar del comportamiento que tienen los vinos cuando pasan en boca. Se utiliza mucho para referirnos a los vinos tintos, que son los que dejan mayor sequedad en la lengua una vez que se ingieren.
Los vinos secos suelen percibirse en boca como ligeros y sueltos, tienen una mayor fluidez. Se caracterizan por tener un aroma y sabor especialmente intenso al inicio. Una intensidad que suele ser corta a medida que bebes y tienen un final más limpio en comparación con otros vinos, como los dulces, que permanecen más tiempo.
Además, podrás reconocer un vino seco cuando tiene un punto de acidez final. Esta acidez suele producirse por la falta de azúcares, que, como hemos dicho con anterioridad, es menor respecto a otro tipo de vinos.